Steve Jobs (1955 – 2011) fue un destacado informático y empresario estadounidense. Fue creador del primer ordenador personal y fundador de Apple Computer, una empresa innovadora en el sector de la informática.
Destacó por su personalidad para hacer negocios. Apasionado y rebelde, intenso y con carácter, su emotividad traspasó hacia su trabajo. Era un total perfeccionista.
Sus lecciones de liderazgo son claves para los que están emprendiendo. Y entre ellas destaca el enfoque: aunque tengas muchas ideas o proyectos, solo concéntrate en las más grandiosas (menos es más).
No te obsesiones con las encuestas y los focus group. “Los consumidores no saben lo que quieren hasta que se lo mostramos”, dijo Jobs. No es lo mismo preocuparse por lo que quieren los consumidores, que preguntarles constantemente qué es lo que quieren.
Steve Jobs tenía la habilidad de enfocarse, acompañada del instinto de simplificar hasta llegar a la esencia de las cosas, para eliminar luego todos los componentes innecesarios.
Aparte de enfocarte, debes simplicar: El primer folleto de Apple en ocasión del lanzamiento de la Apple II el 5 de mayo de 1978, decía: “la simplicidad es la mayor sofisticación”.
Hazte responsable: asume el proceso de principio a fin. Si tus productos son integrados es más fácil la experiencia de usuario.
Toma la delantera: Haberse quedado atrás en la era de los CDs impulsó a Jobs a tomar la delantera y crear un sistema integrado de música que permitiera a los usuarios comprar, guardar, compartir, gestionar y reproducir su música mejor que cualquier otro dispositivo. Sin necesidad de quemar CDs. La creatividad está en darle la vuelta a una situación adversa.
Crea a pesar del costo: No te preocupes por las ganancias y enfócate en dar con un producto o una idea genial.
Ve más allá de lo posible: rompe los paradigmas y ve más allá de las formas.
Sé perfeccionista: sigue intentando dar con el producto perfecto. Jobs era muy detallista y revisaba todos los procesos tanto de producción, ventas y mercadeo hasta que lograr que todo saliera a su gusto. Tenía una verdadera pasión por la perfección y deseaba trabajar sólo con los mejores.
Jobs era amante de las reuniones cara a cara porque las ideas no pueden ser desarrolladas por e-mail o por chat, solía decir. Tenlo en cuenta.
Combina tus habilidades: Aunque Jobs gustaba de la electrónica desde pequeño, combinó sus pasiones y habilidades en otras áreas como humanidades, creatividad, y arte.
